1 de abril de 2020 |

El uso de muñequeras te ayudará a recuperarte la fractura del metacarpiano

Si practicas boxeo, yudo, baloncesto o balonmano, seguramente habrás oído hablar de fractura de los metacarpianos. Una de las lesiones traumatológicas más frecuentes en este tipo de disciplinas y, además, una de las más habituales en la mano.

Sin embargo, que la fractura de los metacarpianos sea tan común en boxeadores o jugadores de baloncesto no significa que sea exclusiva de estos deportistas. Cualquier persona que sufra un impacto fuerte en esta zona, corre el riesgo de romperse alguno de los cinco huesos que unen los dedos con la muñeca y sufrir esta lesión. Un golpe, una caída o una tracción son suficientes para que esto pase y alguno de los huesos de la mano se resienta.

Y, aunque cualquier metacarpiano se puede ver comprometido, las fracturas más habituales son las siguientes:

Fracturas de los metacarpianos más habituales

1. Fractura de Bennett

Se trata de una fractura intraarticular simple con base en el primer metacarpiano, es decir, el que corresponde al dedo pulgar. Suele originarse al producirse un impacto fuerte con el pulgar flexionado. De ahí que esta lesión sea tan común en deportes de lucha y de contacto como el boxeo, el rugby o el fútbol americano.

Aunque no siempre, este tipo de fractura de los metacarpianos suele ir acompañada de un desplazamiento o alejamiento de los huesos entre sí. Un proceso que, en muchos casos, implica la aplicación de un tratamiento quirúrgico.

Quienes sufren una fractura de Bennett suelen presentar inflamación en la base y parte posterior del pulgar, dificultad de movimiento y dolor en la zona.

2. Fractura de Rolando

Al igual que la fractura de Bennett, la de Rolando afecta a la base del primer metacarpiano. Sin embargo, en este caso, se añade un componente de conminución: la fractura se presenta en diferentes fragmentos. Un hecho que dificulta el tratamiento de este tipo de lesiones.

Los síntomas más habituales en este tipo de fractura de los metacarpianos son dolor e inflamación del pulgar y deformidad en el primer metacarpiano.

teyder fractura de metacarpianos

3. Fractura del boxeador

Con este nombre se conoce la rotura del quinto hueso metacarpiano, es decir, el que corresponde dedo meñique. Se origina cuando, de forma accidental o intencionada, se golpea con el puño cerrado una superficie dura o persona. De ahí que la suelan sufrir, en su mayoría, boxeadores y deportistas que practiquen disciplinas de contacto.

Los síntomas más comunes tras una fractura de los metacarpianos de este tipo son dolor, inflamación e imposibilidad para mover el dedo.

La fractura de los metacarpianos es muy común en deportes de lucha y de contacto

A pesar de que cada fractura de los metracarpianos es diferente y, por tanto, también sus protocolos de actuación, hay procedimientos que son comunes a todas. Así, tras una lesión de este tipo, lo más frecuente es poner en práctica alguno de estos tratamientos.

 

Tratamiento para la fractura de los metacarpianos

1. Tratamiento ortopédico

  • Aplicar antiinflamatorios para bajar la inflamación y el dolor.
  • Inmovilizar la zona afectada con ayuda de una férula o una muñequera como la 205MN – 206MN, con férula palmar, o la 512MN, 518MND – 519MND o 725MN, con férula pulgar. Este tipo de ortesis no solo ayuda a estabilizar la zona mientras se consolida el hueso, sino que también la protege de golpes y de movimientos inadecuados durante la recuperación.

teyder fractura de metacarpianos

  • Después de 3 a 4 semanas de reposo, comenzará el periodo de rehabilitación. Siguiendo las indicaciones del especialista, realizaremos una serie de ejercicios que buscarán la movilización y fortalecimiento de los metacarpianos.

2. Tratamiento quirúrgico

Se suele optar por este tipo de tratamientos en aquellas fracturas de los metacarpianos que presentan inestabilidad. El tipo de cirugía a aplicar dependerá del tipo de lesión, pudiendo optarse por la colocación de tornillos o agujas de Kirschnner para estabilizar la zona.

Tras un periodo de 3 o 4 semanas de inmovilización y una vez consolidado el hueso, se iniciará un proceso de rehabilitación similar al del tratamiento ortopédico.

En Teyder estamos especializados en ortesis para tratar la fractura de los metacarpianos. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

 

14 de enero de 2020 |

Los traumatismos y la sobrecarga, detrás de las lesiones infantiles más habituales

Los que tienen hijos lo saben: los niños no paran. Corren, trepan, juegan y, con las prisas y ganas de descubrir, pueden caerse y lesionarse. Y aunque no podemos evitar que los pequeños de la casa se muevan, curioseen o practiquen algún deporte, sí que podemos tomar las medidas necesarias para reducir en la medida de lo posible las lesiones infantiles más habituales.

 

Para conseguirlo, lo primero que deberemos hacer es conocer cuáles son los traumatismos y fracturas a las que se pueden enfrentar. Porque, si bien niños y adultos pueden sufrir las mismas lesiones, hay algunas que se dan con mayor frecuencia en los primeros años de vida o que, por las características del aparato locomotor, difieren sustancialmente de las de los adultos.

¿Como se explica en el artículo “Las lesiones deportivas en niños y adolescentes”, los menores están en pleno crecimiento. Un hecho que modifica de forma sustancial sus condiciones estructurales y funcionales y, por tanto, la tipología y alcance de las lesiones que les pueden afectar.

Así, dentro de las lesiones infantiles más frecuentes, encontraríamos:

1. Lesiones agudas

Son aquellas lesiones infantiles que se originan debido a una caída o traumatismo. Aunque son muchas y muy variadas, estas serían las más habituales.

 

Fractura de clavícula

Según explica el Dr. López Olmedo en la revista Pediatría Integral, esta fractura supone el 10% – 15% del total de las lesiones infantiles y afecta, en mayor medida, a los varones de más de 10 años. Se suele originar cuando el menor cae sobre su propio hombro y, al hacerlo, se daña la clavícula, causando dolor o disminución de la movilidad en el brazo.

Aunque existe la posibilidad de recurrir a la cirugía para tratar esta lesión, la mayor parte de las ocasiones el tratamiento es conservador: se procede a la inmovilización del brazo mediante un inmovilizador de hombro o clavícula como el 430 CK y el 420 CK de Teyder.

lesiones infantiles clavicula

 

Fractura supracondílea

Es una de las lesiones de codo más habituales en edad infantil. Se producen cuando el menor impacta en el suelo sobre su codo o sobre la palma de la mano con el codo en extensión.

Como en el caso de la fractura de clavícula, el tratamiento de este tipo de lesiones infantiles suele ser conservador. Se inmoviliza el brazo con ayuda de un yeso y se utilizan ortesis como la 430 CK o el 435 CK Teyder para garantizar la comodidad del niño durante la recuperación.

 

Arrancamiento de la epitróclea

Esta es una de las lesiones infantiles de carácter agudo más habituales en los niños y afecta al centro de osificación de la epitróclea. La suelen presentar aquellos menores que practican algún deporte donde se ejercita la parte superior del cuerpo y se manifiesta en forma de dolor agudo e inflamación del codo.

A pesar de que se puede recurrir a cirugía, el tratamiento de esta lesión suele ser conservador.

 

La fractura de clavícula supone el 10% – 15% de las lesiones infantiles

 

2. Lesiones por sobreuso o sobrecarga

Son aquellas lesiones infantiles que se dan como consecuencia de una acción repetitiva que sobrecarga huesos y músculos, causando daños de diferente magnitud. Las más frecuentes serían:

 

Enfermedad de Osgood Schlatter

Es una de las lesiones infantiles por sobreuso más habituales y, a pesar de que la pueden padecer menores de cualquier sexo y edad, suelen sufrirla con mayor frecuencia los varones de 11 a 13 años.

Por suerte, su sintomatología es menos alarmante que su nombre. Los niños que la padecen suelen presentar un dolor en la parte inferior de las dos rodillas que se intensifica al realizar deporte y que cesa en reposo. Por esta razón, los especialistas recomiendan hacer reposo en aquellas épocas en las que las molestias son más intensas y, si es necesario, utilizar antiinflamatorios o tratamientos frío/calor para bajar la inflamación.

 

Enfermedad de Sinding Larsen Johansson

Esta lesión infantil se produce cuando se produce una sobrecarga en el tendón rotuliano como consecuencia de una tracción repetida en la rodilla. Suele darse en aquellos menores que practican actividades deportivas relacionadas con los saltos como podrían ser el baloncesto, el voleibol, la carrera de obstáculos o de longitud.

Los niños que sufren este tipo de lesión suelen presentar un dolor intenso en la zona que aumenta al flexionar la rodilla. Debido a esto, los especialistas suelen recomendar el uso de antiinflamatorios y el cese de la práctica deportiva.

lesiones infantiles

 

Enfermedad de Sever

Aunque la suelen sufrir con mayor frecuencia los varones de entre 10 y 12 años, esta lesión infantil puede afectar a todos aquellos menores que presentan tensión muscular en el tendón de Aquiles.

Para paliar el dolor de talón que origina esta lesión, se suele optar por el uso de antiinflamatorios. También se recomienda realizar un estudio de la pisada del niño con el objetivo de determinar qué origina esta tracción.

El uso de un equipamiento adecuado es clave para evitar las lesiones infantiles más frecuentes

 

3. Lesiones recidivantes

Este tipo de lesiones infantiles se originan cuando el menor practica una actividad deportiva antes de que se haya recuperado de la fractura o molestia que le aquejaba. De ahí que sea tan importante respetar el periodo de reposo y recuperación marcado por el especialista y no hacer deporte si se presenta dolor.

Cómo prevenir las lesiones infantiles más frecuentes

Aunque no podemos evitar que los más pequeños jueguen y se lesionen, sí que podemos reducir las posibilidades de que esto pase tanto en el día a día como en los entrenamientos. Para hacerlo, nos aseguraremos de que:

  • El calzado infantil sea el adecuado y, más, si nuestros hijos practican algún deporte.
  • En caso de que practiquen algún deporte, siempre deberán hacerlo con el equipamiento correspondiente (rodilleras, protectores…) y en presencia de un profesional que les supervise y les guíe durante el entrenamiento.
  • Los menores estarán totalmente recuperados de lesiones antiguas antes de reanudar la práctica deportiva.
  • El campo de juego está en buen estado y sin desniveles ni objetos que puedan causarles un golpe o caída.

En Teyder estamos especializados en ortesis para tratar y prevenir las lesiones infantiles. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

 

21 de noviembre de 2019 |

Las fajas sacrolumbares de Teyder alivian el dolor causado por las lesiones lumbares

¿Alguna vez has sentido un dolor intenso en la zona baja de la columna? No eres el único. Según la Fundación Española de Reumatología, el 85% de la población ha sufrido o sufrirá este malestar en algún momento de su vida. Sin embargo, que la lumbalgia –como comúnmente se conoce este tipo de dolor- sea una de las lesiones lumbares más frecuentes no significa que sea normal padecerla. Tampoco que no se pueda prevenir y aliviar el malestar.

 

Lo mismo pasa con la lumbociática. Otra de las patologías de la espalda más frecuente entre los ciudadanos y que, a diferencia de lumbalgia, no se ubica únicamente en la lumbar. Su dolor desciende por la parte posterior o lateral del muslo y se extiende de la zona baja de la columna al pie o el talón.

¿Queréis saber cómo evitar y hacer frente a estas lesiones lumbares? Antes de hacerlo será imprescindible saber qué causas lo originan y qué síntomas presentan. Os lo explicamos.

Síntomas de lumbalgia y lumbociática

Como hemos comentado anteriormente, la lumbalgia y la lumbociática son lesiones lumbares que se presentan en forma de dolor intenso en la parte inferior de la espalda y que pueden irradiar al pie. Sin embargo, a pesar de que la tipología de malestar es la misma, su manifestación puede variar en función de la causa que lo origina.

Por ejemplo, cuando el malestar es de origen mecánico es frecuente que se intensifique cuando estamos en posición vertical y que mejore si nos tumbamos. Por el contrario, cuando la causa del dolor es inflamatoria, este suele presentarse durante la noche, mientras dormimos. En este caso, el movimiento aliviará los síntomas de estas lesiones lumbares.

 

El 85% de la población sufre o sufrirá algún malestar en la zona lumbar

 

Causas de lumbalgia y lumbociática

Que el dolor de la lumbalgia y de la lumbociática afecte a la zona baja de la espalda, no significa que su origen sea el mismo.

Detrás de estas lesiones lumbares se pueden esconder múltiples causas. Y, aunque puede deberse a enfermedades inflamatorias, infecciones e incluso tumores, lo más frecuente es que su origen sea de naturaleza mecánica y fruto de una vida sedentaria.

Algunas de las causas más frecuentes son:

  • Esguinces y distensiones musculares.
  • Hernia discal: la lumbociática está relacionada a este tipo de alteración.
  • Degeneración vertebral: una de las causas más frecuentes de dolor lumbar. Se da cuando los discos pierden su elasticidad, normalmente como consecuencia del envejecimiento.

Cómo prevenir la lumbalgia y lumbociática

El estilo de vida es clave para nuestra salud y la de nuestras lumbares. Por eso, si queremos prevenir las lesiones lumbares deberemos: 

  • Ingesta de antiinflamatorios y/o analgésicos: para bajar la inflamación y aliviar el dolor. 
  • Tratamiento de frío/calor: como en el caso de los medicamentos, buscan reducir la inflamación y el malestar en la zona de forma natural.
  • Ejercicios de fortalecimiento del CORE: es vital para mejorar los síntomas de lesiones lumbares como la lumbalgia o la lumbociática y para prevenirlo.
  • Uso de fajas sacrolumbares: para aliviar el dolor y ofrecer protección en los primeros días de lesión. También puede recomendarse en aquellos casos en que el paciente deba someterse a actividades que requieran esfuerzo y sobrecarga en la zona lumbar.
    En Teyder contamos con fajas sacrolumbares como la 200 FV, la 502 FV o la 700-701 FV o soportes como el 208 FV, 203FV o el 713 FV, con efecto masaje para aliviar el dolor.

faja para las lumbares

El estilo de vida es determinante a la hora de prevenir y tratar las lesiones lumbares

 

Cómo tratar la lumbalgia y lumbociática

Ante un dolor en la zona lumbar agudo y prolongado en el tiempo, lo primero que deberemos hacer es acudir a un médico especialista. Será él quien, después de un examen, elabore un diagnóstico y determine el protocolo a seguir en función de su gravedad y origen.

Aunque el tratamiento variará en función del tipo de afectación (medular, nerviosa u osteo-muscular), suele incluir:

  • Hacer ejercicio: el sedentarismo es un factor de riesgo para sufrir cualquier lesión. También, la lumbalgia y la lumbociática. Si queremos evitarlo, deberemos incluir la actividad física en nuestro día a día y ejercicios encaminados a fortalecer el CORE.
  • Evitar el sobrepeso y obesidad: el exceso de peso supone una sobrecarga en la zona baja de la espalda y puede ocasionar dolor lumbar. Una buena alimentación y una vida activa nos ayudarán a prevenirlas
  • Cuidar la higiene postural: pasar demasiadas horas sentados o hacerlo en mala postura puede debilitar la espalda y hacernos más propensos a sufrir lesiones lumbares como la lumbalgia o la lumbociática. Evitar posiciones en hiperextensión e hiperflexión de la columna es clave para la salud de nuestra espalda.
  • Evitar sobrecargar las lumbares: hay profesiones y deportes que, por el esfuerzo físico que requieren, pueden poner en riesgo la salud de nuestras lumbares. Tomar consciencia de nuestra higiene postural cuando levantamos peso o lo empujamos o hacerlo con ayuda de alguna faja como las de Teyder puede proteger la espalda de lesiones lumbares.

 

  • faja para las lumbares

En Teyder estamos especializados en ortesis para tratar y prevenir las lesiones lumbares. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

 

16 de octubre de 2019 |

El Síndrome del Pinzamiento Subacromial, en el primer puesto del ranking de lesiones de hombro

Con el hombro pasa como con la muñeca, el tobillo u otras partes del cuerpo: solo nos damos cuenta de su importancia cuando nos lesionamos y lo debemos mantener en reposo. Y es que, sin él, realizar actividades tan habituales como escribir, comer, bañarse o conducir se hace del todo imposible. De ahí que sea tan importante evitar aquellas tareas que puedan poner en riesgo salud y, también, actuar a tiempo cuando detectemos el primer indicio de que algo no va bien. Y, aunque los síntomas pueden ser muchos y variados y las formas de abordarlos también, hoy os hablaremos de los que corresponden a las lesiones de hombro más frecuentes.

 

Síndrome del Pinzamiento Subacromial

Bajo este nombre se esconde una de las lesiones de hombro más comunes. Se produce cuando la parte superior del manguito de rotadores (el músculo que dota de estabilidad y rotación a la articulación del hombro) se comprime como consecuencia de la disminución del espacio entre la cabeza del hueso humero y el acromion.

Este estrechamiento puede deberse a varias causas: desde la misma constitución del hombro hasta la realización de movimientos repetitivos y prolongados en el tiempo y que originan la inflamación de la zona. Las personas que, por su profesión o por el deporte que practican, deben alzar el brazo por encima de la cabeza tienen más riesgo de sufrir esta lesión. De ahí que nadadores, jugadores de waterpolo, de balonmano o de baloncesto suelan ser los que más la presenten.

A pesar de que su origen puede ser diverso, su sintomatología suele ser muy similar. Y es que las personas que padecen Síndrome del Pinzamiento Subacromial suelen presentar dolor en el hombro y, si no se actúa a tiempo, debilidad y pérdida de movilidad.

Por eso, resulta de vital importancia acudir a un especialista nada más presentar los primeros síntomas. Tras realizar las pruebas de imagen correspondientes, evaluará la gravedad de la lesión y determinará si se debe someter a un tratamiento conservador o si, por el contrario, debe optar por una intervención quirúrgica. En el primero de los casos, se combinarán las sesiones de fisioterapia con los ejercicios de musculación. En el último, tras la operación, se deberá inmovilizar el brazo con ayuda de ortesis como el 436CH y el 434CH de Teyder y después someterse a un programa de fisioterapia y musculación.

hombro inmobilizado

Tendinitis del manguito de rotador

Esta dolencia suele afectar al tendón supraespinoso y puede presentarse tanto en personas jóvenes como aquellas que están en edad avanzada, siendo una de las lesiones de hombro no traumáticas más comunes. En la mayoría de los casos es secundaria a un síndrome de pinzamiento subacromial.

Como en el caso de otras lesiones de hombro, las causas de su aparición pueden ser varias: desde la degeneración del tendón como consecuencia de la edad hasta la realización de un esfuerzo o sobrecarga en el hombro prolongado en el tiempo. Las personas que tienen más posibilidades de sufrir esta inflamación debido a un sobreesfuerzo son aquellas que, por su profesión o por el deporte que practican, deben alzar el brazo de forma repetida por encima del hombro.

Los movimientos repetitivos y prolongados en el tiempo pueden causar lesiones de hombro

Y, ¿cómo saber que sufren una tendinitis y no otra patología? Además de inflamación, sentirán molestias, ardor y rigidez en la parte frontal del hombro cuando levantan o descienden el brazo. En sus inicios, el dolor puede ser leve. Pero, si no atienden las señales que les envía el cuerpo, la sintomatología se puede agravar y pueden llegar a perder fuerza y movilidad en la zona.

Ante cualquier síntoma, lo recomendable será acudir al médico especialista para que valore la gravedad de la lesión y el procedimiento a seguir para erradicarla. Y, aunque el tratamiento dependerá de la sintomatología que presente el paciente, la primera opción siempre suele ser el tratamiento conservador.

 

Tendinitis calcificada

A pesar de que la tendinitis calcificada puede afectar a personas de ambos sexos, lo cierto es que son las mujeres de entre 40 y 60 años las que tienen más probabilidades de sufrir una dolencia que conlleva la formación de depósitos de calcio en el manguito de rotadores.

Todavía se desconocen las causas que originan este tipo de tendinitis, pero todo parece apuntar a que los microtraumatismos de repetición, alteraciones en el metabolismo o la genética podrían estar detrás de la que hoy en día es una de las lesiones de hombro más frecuentes y, también, las que más desapercibidas pasan. Y es que, según estudios, entre un 10 y un 20% de los casos de tendinitis calcificada no presentan sintomatología.

En el porcentaje restante, el pronóstico no es tan alentador. Síntomas como el dolor intenso nocturno o la pérdida de movilidad suelen ser habituales entre las personas que padecen tendinitis calcificada en el hombro.

Para revertir esta situación y mejorar la calidad de vida de aquellos que sufren esta lesión, se suele optar por un tratamiento que incluye la ingesta de antiinflamatorios y la realización de ejercicios que buscan aumentar la movilidad del hombro y reducir el malestar.

En caso de que el tratamiento conservador no surja efecto, se suele recurrir a la intervención quirúrgica y al uso de inmovilizadores de hombro en los primeros días después de la operación.

inmovilizador hombro

 

La tendinitis calcificada afecta, en su mayoría, a  mujeres de entre 40 y 60 años

Rotura del manguito de rotador

De la misma forma que otras lesiones de hombro, la rotura del manguito de rotador puede deberse a causas diferentes: un traumatismo fuerte en la zona o, en su defecto, estrés mecánico prolongado en el tiempo. Y, mientras que el primero suele afectar a personas jóvenes –en su mayoría deportistas- mientras practican alguna disciplina deportiva, el segundo suele aparecer en mayores y como consecuencia de un Síndrome del Pinzamiento Subacromial no tratado.

En ambos casos, los afectados suelen aquejarse de un dolor intenso en el hombro e incapacidad para mover el brazo y deben someterse a programas de rehabilitación para recuperar la movilidad. Tan solo aquellos que presenten mayor gravedad se someterán a una intervención quirúrgica.

En Teyder estamos especializados en ortesis para tratar y prevenir lesiones de hombr. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

 

12 de agosto de 2019 |

La falta de preparación, detrás del 25% de las lesiones en deportes de verano

Hay personas que, cuando llegan los meses de julio y agosto, aparcan los entrenamientos y se dan un tiempo para descansar. Otras que, por el contrario, aprovechan la temporada estival para ponerse en forma o para practicar su deporte preferido. Decantarse por esta segunda opción es perfecto. De hecho, realizar actividad física siempre lo es. Sin embargo, lo que nunca debemos olvidar es que, independientemente de la estación, debemos proteger nuestras articulaciones. Solo así evitaremos que un esguince o fractura eche a perder nuestras vacaciones. Y es que, aunque resulte extraño, las lesiones en deportes de verano son mucho más frecuentes de lo que parece.

¿La razón? Muchos de los que se lanzan al mar a nadar o con una tabla de surf o de los que juegan al vóley o al fútbol en la playa, no disponen de la preparación física necesaria para practicar estas disciplinas. Así lo indica un estudio elaborado por la Sociedad Española de Traumatología del Deporte (SETRADE) y que señala que el 25% de las lesiones que se registran en esta época se deben a esta razón.

Cómo prevenir lesiones en deportes de verano

1. Prepararnos físicamente

Para prevenir esguinces, roturas u otro tipo de percances, además de disponer de nociones del deporte a practicar, es necesario ir poco a poco. No podemos pasar de una vida sedentaria a una totalmente activa sin que esto repercuta en nuestra salud física y lo haga de forma negativa. Por eso, es recomendable realizar sesiones de entrenamiento de corta duración e intensidad e ir aumentando su dificultad conforme vayamos cogiendo tono.

2. Calentar y estirar

Otro aspecto que debemos tener en cuenta si queremos sortear las lesiones en deportes de verano, es que necesitamos calentar y estirar antes de cada sesión. Igual que lo haríamos en el gimnasio antes de un entrenamiento. Tan solo dedicando 5 o 10 minutos a cada acción lograremos:

  • Preparar el músculo y restablecer la movilidad de las articulaciones antes de la práctica deportiva.
  • Reducir la tensión a la que han estado sometidos los músculos y las articulaciones durante el ejercicio.

La preparación física es clave para evitar lesiones en deportes de verano 

3. Utilizar ortesis deportivas

Las tobilleras, las rodilleras, las muñequeras o las coderas deportivas como las de la línea Sport One o Neothermik de Teyder, no solo tienen como objetivo ayudar a recuperarnos de lesiones en deportes de verano, también a prevenirlas y evitar recaídas. Sobre todo, en disciplinas de alta impacto como el vóley playa. Son de gran utilidad para:

  • Mejorar nuestro rendimiento.
  • Reducir la sensación de fatiga.
  • Sobreponernos de un duro entrenamiento.

Lesiones en deportes de verano más frecuentes

1. Natación

El deporte por excelencia del verano y uno de los que más quebraduras de cabeza trae. Y no es un decir. Son muchos los nadadores que se lanzan al agua desde trampolines y calas y que, por desconocimiento de la zona y por falta de preparación, chocan contra el fondo de la piscina o las rocas. Un impacto que puede originar la hiperextensión del cuello y causar desde una lesión leve en la zona hasta una de carácter irreversible en la médula espinal.

Otras dolencias igual de frecuentes, pero sin consecuencias tan graves para el nadador son:

  • Lesión de hombro: conocida también como hombro de nadador, la suelen padecer aquellos deportistas que practican natación de competición o de forma regular. Se da cuando el hombro se somete a sobreesfuerzo.
  • Lesión cervical y de espalda: el giro constante de cabeza y la extensión de cuello puede causar molestias leves en la zona. Si no se tratan a tiempo, puede llegar a ser severos y cronificar en el tiempo.
  • Lesión de rodilla: apodada rodilla del nadador o del bracista, esta lesión suele darse en aquellos deportistas que practican braza y someten la parte interna de la rodilla a tensión.

rodillera teyder

¿Quieres disponer de más información sobre las lesiones en deportes de verano como la natación? En nuestro artículo “Las cuatro lesiones en natación más comunes”, las explicamos detalladamente.

El uso de ortesis deportivas ayuda a prevenir y tratar lesiones en deportes de verano

2. Surf

Otro deporte acuático que triunfa cuando llega el calor es el surf. Para practicarlo, además de una tabla, se necesita disponer de una buena preparación. Las olas, la corriente y el viento ponen a prueba tu equilibrio, pero también ponen en riesgo tu salud. Las caídas y movimientos bruscos son frecuentes en esta disciplina y, con ellas, los rasguños, contusiones y lesiones. ¿Quieres saber cuáles son las más frecuentes?

  • Lesión de rodilla: para mantenerse de pie encima de la tabla, los surfistas no solo deben permanecer con las piernas flexionadas sino también rotar las rodillas de forma rápida para evitar que las olas les hagan caer. Estos movimientos pueden causar desde pequeñas molestias hasta un esguince.
  • Lesión de hombro: aunque cualquier surfista es susceptible de sufrirla, lo cierto es que son los aficionados los que más riesgo tienen de padecer una lesión en el hombro. Para llegar a mar adentro, es necesario remar con los brazos y, la falta de experiencia, puede originar tendinitis en el hombro.

3. Vóley playa

Aunque el vóley playa, al igual que la natación o el surf, se puede practicar en cualquier época del año, es en verano cuando más deportistas profesionales y aficionados concentra. Y es que esta disciplina, además de ser muy intuitiva, no requiere de mayor inversión que una pelota. La mayoría de las playas de la costa española están dotadas de redes para practicarla y, debido a la imprudencia de algunos jugadores, de lesionados.

Las articulaciones que más se resienten con la práctica de esta disciplina son:

  • Hombros: ciertas jugadas, como el saque, requieren de movimientos rápidos que ponen en tensión esta articulación y la pueden dañar. También, ciertas caídas en la arena intentando alcanzar alguna pelota.
  • Tobillos: aunque caminar sobre arena de playa es muy gratificante y relajante, jugar sobre ella no previene de lesiones. Un mal movimiento puede hacernos perder estabilidad, caer sobre alguno de nuestros tobillos y dañarlo. De hecho, los esguinces y las fracturas de esta articulación son algunas de las lesiones en deportes de verano más habituales.

tobillera teyder

  • Rodillas: con el objetivo de reaccionar rápido y no perder ninguna pelota, los jugadores de vóley playa permanecen con las piernas flexionadas y realizan movimientos bruscos para llegar hasta ella. Estas jugadas pueden causar desde molestias en las rodillas hasta lesiones más graves como la tendinitis rotuliana.
  • Dedos: en deportes como el vóley, pegar a la pelota requiere de técnica. Hacerlo mal o de forma muy brusca puede ocasionar desde esguinces, luxaciones o fracturas en los dedos. Si los deportistas profesionales se exponen a este tipo de lesión, más aún los aficionados.

Calentar y estirar, dos indispensables si queremos evitar lesiones en deportes de verano

Cómo tratar las lesiones en deportes de verano

Lo primero que deberemos hacer es acudir a un médico especialista. Será él quien elabore un diagnóstico y quien, en función del tipo de lesión y su gravedad, nos indique si debemos permanecer en reposo, tomar medicación o hacer uso de una muñequera, codera, rodillera o inmovilizador de hombro.

En Teyder, disponemos de ortesis especialmente indicadas para prevenir y tratar lesiones de tobillo, rodilla, muñeca, codo, hombro o cuello.

 

En Teyder estamos especializados en ortesis deportivas. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos

 

26 de julio de 2019 |

Conoce la nueva gama de botas Walker Airstep de Teyder

¿Alguna vez te han escayolado una pierna? Si la respuesta es afirmativa, sabrás lo incómodo que puede resultar pasar semanas inmovilizado mientras te recuperas de una intervención quirúrgica, de una patología o de lesión en la zona. Y, más, durante los meses de verano, cuando el calor aprieta y el yeso resulta más molesto. Justamente con la finalidad de garantizar la protección y la comodidad del usuario en procesos postoperatorios y de recuperación nacen las botas Walker Airstep. Dos ortesis pensadas para inmovilizar el pie y que, gracias a su innovador sistema de inflación, permiten su ajuste de forma independiente y rápida.

 

¿Qué tipos de botas Walker Airstep existen?

La nueva gama de Walker Airstep de Teyder está formada por dos ortesis diferentes: la bota Walker Airstep larga y la bota Walker Airstep corta. Aunque el diseño varía, su objetivo es el mismo: inmovilizar y proteger el pie y la articulación tibio-tarsiana durante la recuperación de una lesión del tendón de Aquiles o tras una cirugía maleolar, de tibia o de peroné..

Además de estas funciones, cumplen otra: aportar confort durante el proceso de rehabilitación. Y es que, a diferencia de lo que ocurre con la escayola –y siempre que la patología lo permita-, las botas Walker Airstep pueden retirarse para facilitar la higiene personal, hacer curas o permitir su drenaje.

walker corto teyder

¿Qué hacen diferentes a las botas Walker Airstep?

Como hemos comentado con anterioridad, una de las particularidades de la nueva gama de ortesis de Teyder es su método de inflación: un sistema integrado que permite ajustar perfectamente la bota Walker Airstep al pie y que, gracias a su diseño y a su válvula doble, posibilitan su inflación de forma fácil y rápida

Sin embargo, aunque esta es una de sus principales características, no es la única. Existen otros peculiaridades que convierten a las botas Walker Airstep en una apuesta segura por la protección y la comodidad.

  • Son ligeras y transpirables, al igual que el forro que incluyen en su interior.
  • Disponen de una suela de balancín de bajo perfil para mejorar la marcha.
  • Cuentan con un sistema de cierre de velcros para facilitar su ajuste y su rápida colocación.
  • Tienen un protector de dedos extraíble y ajustable al pie de cada persona.

En Teyder somos especialistas en ortesis. ¿Necesitas que te aconsejemos? Contacta con nosotros y te ayudaremos